¿Por qué mi sangre viertes
sobre tus floridos principios
y en la alevosa muerte adviertes
que no se escuchen mis gritos?
¿Por qué mi vida no te vale
más que la ajada moneda
que cae sobre la cara oscura
de la mentira más negra?
¿Por qué negarme pudiste los llantos
que piedad te suplicaban
sin haber escuchado a quienes
con gritos pararte pedían?
¿Por qué tu palabra ordenaba
sajar con cuchillo de acero
los porqués y los te quiero
para cambiarlos por miedo?
Maldecirte sería fácil,
odiarte lo más sencillo,
pero aún habitan en mí las flores
del jardín de los principios.
Diez años hace que visitaste
con redoble de muerte mi casa.
Diez años hace que entraste
a robarme la esperanza.
Dedicado al pueblo de Irak, cuyo dolor es inmerecido.
David Marzal
Profesor y escritor
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada
Es prega sinceritat. Se ruega sinceridad.